viernes, 11 de julio de 2014

Un lejano frente de guerra, por Joel Correa


- Luces de fondo atraviesan el cielo en ésta oscura ciudad, son los misiles caseros de la delincuencia organizada, los drones de ambos bandos también vigilan zonas llenas de barricadas e incendios. Los drones del ejército patrullan pero nadie sabe el porqué de su pasividad, a pesar del sonido de fondo de los disparos. Únicamente nos queda un frente de batalla lejano, en el que soldados y empresas privadas de seguridad se abren paso en cada calle de esta ciudad controlada por grupos armados – dice el reportero desde la ventana de un hotel.
La cámara muestra edificios en ruinas con misiles caseros iluminando la noche y pequeños drones atentos, volando con seguridad y esperando el momento de alguna señal para activar sus armas.
- Nadie sale a las calles, los francotiradores disparan a cualquiera que se vea corriendo. Hay preocupación en los albergues, ya se habla de falta de comida y los niños no pueden salir de este lugar. Estamos en la zona centro y cada hora se habla del posible avance de los soldados.
La toma de la cámara ubica un edificio cercano donde aparece una luz, se escuchan gritos de fondo, un grupo corre para entrar al edificio; se alcanza a escuchar la comunicación por radio.  Un vecino grita algo que no se entiende.

La toma de la cámara se dirige al balcón donde se encuentra el vecino, justo al lado, cuando sale la cámara por la ventana para tomar la escena se nota un claro temblor en la imagen, y a continuación se observa la toma en el suelo de la habitación llena de cristales y polvo. El reportero tirado ya en un rincón de la habitación grita ¡NOOOO!